Se encontraba perdido en un inmenso vacío color blanco, mientras se llenaba de dudas, angustias, alegrías, penas, sueños, derrotas, sueños, derrotas, sueños, angustias, alegrías, intrigas, penas, dudas, y ecos latentes, resonancias intensas, sonidos atemorizantes, cada partícula blanca se transformaba perseverantemente mientras caían frenéticamente las luces destellando de forma zigzagueante, con un brillo intenso, intensamente explosivo, dudoso, frenético, agónico, alegre, un destello derrotado que se desvanece tristemente como aquella estrella fugaz a la cual tantas veces le clamaste por felicidad, felicidad que dudosamente pudo llegar a transformar el parpadeante cambio de matices en mi cuarto blanco, precisamente blanco, saturado de partículas en invariable transición, llenas de sentimientos ingenuos, llenas de frío, calor, odio, alegría, pero más aún, llenas de indecisión verde-azul.Nel.-
23:33 PM
22/06/09
3 comentarios:
Me paso de los colores a los sonidos con tu relato.
La fugacidad hecha palabras. Felicitaciones.
El manicomio del que hablabamos se me hace cada vez mas presente cuando leo el relato de "Fugaz".
Un saludo compañero, ahora estoy redactando algo para Psicosis.
lindo el color suave
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